(Durango, 1999)

Pintor duranguense cuya obra se construye en los márgenes, entre el realismo figurativo y la experimentación conceptual. Formado en la Escuela de Pintura, Escultura y Artesanías (EPEA), su práctica parte de un gesto radical: pintar sobre telas recuperadas de tianguis —cortinas, manteles, ropa— que cargan memoria antes de ser intervenidas.

Ganador del Premio Estatal de Pintura Guillermo Bravo Morán en dos ediciones (2022 y 2024), beneficiario de la beca PECDA (2024) y participante en certámenes nacionales como el Premio de Pintura Fermin Revueltas y el Premio de Grabado Guillermo Ceniceros (2023), Aldaba se consolida como parte de la nueva generación de artistas emergentes en México que expanden los límites del realismo hacia territorios críticos y contemporáneos.

En su serie más reciente, De mañana en ocho días, convierte la dinámica de los tianguis de Durango en un archivo vivo de memoria y resistencia, donde la infancia, los oficios y los objetos cotidianos se transforman en símbolos de comunidad y fragilidad social. Sus obras no buscan embellecer lo marginal, sino activar preguntas sobre consumo, identidad y estética popular.